Pese a sus afinidades histórico-culturales, a su proximidad geográfica y a que fueron aliadas en dos ocasiones (Confederación y Guerra del Pacífico), subsistieron las divergencias perú-bolivianas.
Las difíciles relaciones de Bolivia con Perú a lo largo del siglo XIX, estuvieron centradas en tres hechos principales: 1) La posesión del puerto de Arica, 2) El intervencionismo político de un país en el otro, 3) La acuñación de moneda feble en Bolivia. La posesión del puerto de Arica ha sido un anhelo constante boliviano (al que siempre se opuso Perú) debido a que es el que se encuentra más cerca de sus centros vitales y por donde históricamente ha transcurrido su comercio. Como dueño de Arica, el Perú ponía fuertes gabelas al comercio de importación y exportación de Bolivia creando malas relaciones y conflictos. Otro hecho semejante se refiere a la injerencia de los caudillos militares peruanos en Bolivia y viceversa. Personajes como Gamarra, Pezet, Castilla y Echenique en Perú o Santa Cruz, Ballivián y Belzu en Bolivia, trataron de influir en la vida del vecino mediante intervenciones militares o actividades a favor o en contra de los gobernantes de uno u otro país ocasionando fricciones políticas en ambos. La acuñación de moneda feble, que se adoptó en la época de Santa Cruz, constituyó una queja permanente en el Perú dando lugar a peligros inminentes de guerra entre ambos países. Por último, hubo un conflicto de límites en la zona del río Acre que fue zanjado mediante un tratado que se firmó en 1909.
Alianza o anexión
Cuando se produjo el debate sobre la creación de una nueva república, surgieron dos representantes paceños (Eusebio Gutiérrez y Juan Manuel Velarde) propugnando la anexión al Perú la que fue desechada por la inmensa mayoría. A los pocos años se produjo la invasión de Gamarra en procura del mismo objetivo. Este fue reiterado en el proyecto de confederación propugnado por Santa Cruz en Bolivia y Orbegoso en el Perú, pero fracasó. La nueva invasión de Gamarra y la derrota que éste sufrió a manos de Ballivián (a raíz de la cual éste ocupa Puno) son otros tantos intentos anexionistas varias veces reiterados. En resumen, puede afirmarse que la coincidencia de intereses de ambos países en más de un aspecto, no fue suficiente para cimentar entre ellos una amistad y paz duraderas durante el siglo XIX.
El laudo arbitral de 1908
Dibujo. El laudo arbitral de 1908 - El presidente argentino José Figueroa Alcorta.
El presidente argentino José Figueroa Alcorta fue nombrado arbitro para zanjar las diferencias entre Perú y Bolivia con respecto a los territorios entre los ríos Madre de Dios y Acre, en la parte oeste de lo que ahora es departamento Pando. Los limites en esta región, pese a los esfuerzos hechos por los dos países, se mantenían indefinidos desde 1902, en pleno auge de la explotación gomera. Para fundamentar sus derechos ante el árbitro, ambos países mandaron realizar sendos estudios e investigaciones en el Archivo de Indias, lo cual produjo excelentes trabajos como los de Víctor Maúrtua en el Perú y Bautista Saavedra en Bolivia que constituyen ahora fuentes para el estudio de la historia colonial de esa zona. El fallo del árbitro, dictado en julio de 1908, fue impugnado por Bolivia ya que no satisfizo sus expectativas. Nuestro país arguyó que el presidente argentino se había excedido en las atribuciones que se le confirieron a tiempo de someter el diferendo territorial a un arbitraje. Este hecho produjo animosidad en Bolivia con Argentina dando origen a manifestaciones hostiles que incluyeron la suspensión de relaciones diplomáticas entre los dos países. En vista de estos inconvenientes, tanto Perú como Bolivia resolvieron llegara un acuerdo directo, de carácter bilateral. La controversia quedó superada con la suscripción del Tratado Sánchez Bustamante-Polo en 1909. La definición de este litigio hizo posible que la explotación gomera en la zona litigiosa continuara normalmente y que ambos países establecieran sus aduanas y puntos de control en sus respectivos territorios.
El Tratado Secreto de 1873
No obstante, sus continuos roces y conflictos por cuestiones comerciales y políticas e intervenciones recíprocas, en febrero de 1873, Bolivia y Perú, preocupados por los avances chilenos en el Litoral boliviano, durante el gobierno de Adolfo Ballivián, firmaron un tratado de alianza defensiva. Por medio de él, ambos países se comprometían a garantizar la independencia, soberanía e integridad territorial de cada uno de ellos, y a defenderse de toda agresión externa. Una cláusula adicional dispuso que el tratado permaneciera secreto, pero Chile lo conoció en circunstancias en que los aliados buscaban, infructuosamente, la adhesión de Argentina al tratado. Esto sirvió de excusa a este país para la invasión chilena a Antofagasta y la consiguiente Guerra del Pacífico que privó a Bolivia de su costa marítima.
Península de Copacabana
Dibujo. Tratado de 1826 - Península de Copacabana.
El tratado suscrito en 1826 entre Ignacio Ortiz de Zeballos del Perú y Casimiro Olañeta de Bolivia, estipulaba que aquel país cedería Arica a cambio de la península de Copacabana en el lago Titicaca, el territorio de Apolobamba (actual provincia Iturralde en el norte de La Paz) y un millón de pesos fuertes. Pero el convenio no fue ratificado por el Perú quedando Bolivia privada de la posesión de Arica, considerada como su “puerto natural”. Cobija quedaba muy distante.
Mientras en el mundo
I República Española
1873. Entre febrero de 1973 y enero de 1974, se proclama la I República Española, organizada en forma de un gobierno republicano. El proceso es más conocido como el Sexenio Democrático.
Sistema métrico decimal
1875. La mayoría de los países adoptan el sistema métrico decimal para los pesos y medidas.
Primer teléfono
1876. Alexander Graham Bell, inventa el teléfono. El aparato transmite y recibe voz humana.
Motor de combustión
1977. El motor de cuatro cilindros es construido por el alemán Nikolaus August Otto.