1) Tomar una serie sucesiva de números naturales, por ejemplo, los primeros 100 números, empezando por el uno;
2) Escribir estos números en columnas de 10, empezando en forma horizontal;
3) Tachar todos los números que sean divisibles por dos;
4) Proceder en igual forma para todos los números que sean divisibles por 3 – 5 – 7;
5) No tachar aquellos números que sean divisibles por ellos mismos: 2 – 3 – 5 – 7 y 11;
6) Todos los números no tachados constituyen los números primos dentro de la serie de los primeros 100 números, siendo ellos los siguientes:
1– 2 – 3 – 5 – 7 – 11 – 13 – 17 – 19 – 23 – 29 – 31 – 37 – 41 – 43 – 47 – 53 – 59 – 61 – 67 – 71 – 73 – 79 – 83 – 89 y 97;
7) Esta tabla se la conoce con el nombre de Criba de Eratóstenes.