LOS ESPAÑOLES EN EL PERÚ.
Los españoles vinieron a América después de haber expulsado de la península ibérica a los moros. La conquista se produjo con poco esfuerzo y dio lugar a la ocupación de un inmenso, rico y poblado territorio.
LA CONQUISTA DEL PERÚ. La tecnología peninsular inmensamente superior a la incaica, el descontento de los pueblos que estaban sometidos por los quechuas, la guerra civil que acababa de estallar entre los hermanos Huáscar y Atahuallpa, fueron los principales factores para que unos pocos y osados hombres (168), derrotaran y doblegaran, en Cajamarca, al imperio más poderoso de América del Sur.
En noviembre de 1532, el inca Atahualpa fue tomado preso sin que su gente pudiera reaccionar o resistir. Blandiendo armas inocuas, los indígenas murieron luchando en defensa de su gobernante. Arcabuces, cañones, caballos, lanzas y espadas dejaron miles de muertos.
El Inca, una vez preso creyó en la posibilidad de ser liberado, para lo cual ofreció llenar una habitación con piezas de oro y dos veces de piezas de plata y a una altura hasta donde alcanzara su brazo extendido hacia arriba. La promesa fue cumplida por el Inca, pero para Francisco Pizarro, jefe de la hueste invasora, Atahualpa preso representaba una amenaza pues era el único (Huáscar murió) que podía reunificar a todos los habitantes del Tahuantinsuyo. No importaba la cantidad de oro y plata pagada para su rescate, era necesario eliminarlo a fin de alejaras el peligro que significaba tenerlo con vida.
LA EXPEDICIÓN DE PIZARRO
MUERTE DE ATAHUALLPA.
El 24 de junio de 1533, el inca Atahualpa es condenado a morir en la hoguera por su condición de infiel. A última hora la sentencia fue conmutada por la pena de garrote ya que accede a ser bautizado con el nombre, precisamente, de Francisco, el causante de su desgracia. El cura Vicente Valverde cree haber ganado un alma para el cielo, pero lo más probable es que se trate de un intento desesperado del Inca para conservar su cuerpo, de manera que su gente pueda ejecutar en él, los rituales necesarios que le han de otorgar la vida eterna entre sus antepasados y su padre el Sol.
Disputas Internas.
Las ambiciones de riqueza y poder, originaron entre los españoles, una serie de enfrentamientos que tuvieron sangrientas consecuencias. Francisco Pizarro y Diego de Almagro, disputaron la posesión del Cuzco y las riquezas que rodeaban a esta ciudad, pues cada uno de ellos alegaba encontrarse dentro de su gobernación.
En 1538, en la batalla de las Salinas, Almagro sufrió una derrota y, conducido al Cuzco, es degollado. Su gobernación, Nueva Toledo, fue concedida a Gonzalo Pizarro, quien inició la conquista y colonización del Kollasuyo que pasó a ser denominado Charcas. La paz duró poco. En 1541, los almagristas volvieron a sublevarse al mando de Diego de Almagro hijo, acabando con la vida de Francisco Pizarro. Un comisionado enviado del Rey, Vaca de Castro, auxiliado por los partidarios del difunto Pizarro, venció a Almagro el Mozo, en la Batalla de Chupas que tuvo lugar en 1542, al cabo de la cual fue ejecutado por rebelde.
La rebelión de los encomenderos
Las Nuevas Leyes dictadas en 1542, establecían que, a la muerte del encomendero, la encomienda quedaba vacante y pasaba a usufructo de la Corona, dejando de ser hereditaria. Para hacer cumplir las nuevas disposiciones, Blasco Núñez Vela, fue nombrado primer Virrey del Perú.
Los encomenderos a la cabeza de Gonzalo Pizarro, quien dominaba en Perú, Chile y Charcas, se sublevaron, llegando con un ejército hasta Quito en persecución del virrey, quien fue derrotado y muerto en la batalla de Añaquito, en 1546. EI movimiento de Pizarro, en ciertos momentos, tuvo un carácter independentista pues trató de hacerse coronar como rey del Perú. El monarca español, dio plenos poderes para pacificar el Perú, a Pedro de La Gasca. Este derrotó a los encomenderos rebeldes en abril de 1548. Gonzalo Pizarro fue juzgado por traidor y condenado a muerte.