La pugna por la capitalía de la república, la forma de gobierno que debía adoptarse y la rebelión generalizada de los indígenas del altiplano, constituyen los hechos más salientes de la Revolución Federal.
Se conoce con este nombre a una contienda civil (1898-1899) que enfrentó con las armas a las ciudades de Sucre y La Paz y que se definió a favor de esta última. La disputa se centró en torno a cuál de las dos ciudades sería la capital definitiva de Bolivia pues, durante los primeros años de la república, la capital residía en Sucre. Pero La Paz se fue imponiendo debido a su proximidad al Océano y al hecho de ser más poblada y más rica. El partido liberal, a nombre de La Paz, propuso el federalismo en la convención nacional reunida en Sucre en 1898. Los chuquisaqueños, a su vez, presentaron un proyecto de “ley de radicatoria” disponiendo que el gobierno residiera permanentemente en Sucre. Al sancionarse dicha ley, la representación parlamentaria paceña, en señal de protesta, abandonó las sesiones mientras que en La Paz se formó una “Junta Federal de Gobierno” que nombró al coronel José Manuel Pando jefe del ejército que se puso en campaña. Este, con la ayuda del Willka aymara, Pablo Zarate, derrotó al ejército del presidente Alonso.
Zarate, “el temible willka”
“No muy lejos de Sicasica se extendían los dominios de Pablo Zarate Willka, General de División del Ejército Federal. Es presumible que dada la popularidad de Pando entre la población aborigen, los cabecillas le prometieron su participación a cambio de la protección oficial contra los usurpadores de tierras pues a la población indígena se le dijo que de su actitud ante las fuerzas alonsistas dependía la conservación de su hacienda y de su propia vida.
Durante el combate del Segundo Crucero, Zarate Willka capitaneaba sus aguerridas montoneras a vanguardia de las ocultas fuerzas federalistas. Encontró muerte inesperada e insólita a manos de un grupo de impávidos victimarios encargados de conducirlo a la ciudad de La Paz”.
El Estado Federal de La Paz
Durante la campaña librada entre diciembre de 1898 y abril de 1899 entre el ejército del presidente Severo Fernández Alonso y el federal paceño comandado por el coronel José Manuel Pando, se formó una Junta del Estado Federal de La Paz que estuvo presidida por Federico Zuazo, en calidad de Gobernador, con total prescindencia del gobierno nacional legítimamente establecido en Sucre. Esto ocurrió como rechazo a la “ley de radicatoria” por el Congreso de 1898. Terminada la contienda, con el triunfo paceño, se formó una Junta Revolucionaria de Gobierno, encabezada por Pando, e integrada por Serapio Reyes Ortiz, Macario Pinilla y Fernando Eloy Guachalla, quienes se apresuraron en declarar que no se instaurará el régimen federal. Sometido el tema a votación en la Convención Nacional que se reunió en Oruro, se impuso la tesis del sistema unitario de gobierno defendida por quienes habían ido a la lucha enarbolando el federalismo.
Las quejas de La Paz con respecto a Sucre
La queja principal de los paceños durante los años previos al conflicto armado estaba en la desproporción existente entre los ingresos y el gasto público departamental. Un alegato escrito por el paceño Claudio Quintín Barrios, demostraba que, comparando los ingresos de los departamentos de Chuquisaca y La Paz en 1896, el primero produjo Bs 202.076 mientras sus gastos se elevaron a Bs 347.023. Con La Paz se daba la situación inversa: mientras sus rentas departamentales producían Bs 1.419.433, el tesoro nacional sólo le giraba Bs 111.000, o sea, menos del 10 por ciento de lo que La Paz aportaba a la caja común del erario fiscal.
En 1897, las subvenciones para Chuquisaca ascendieron a Bs 780.865 con destino a obrasen el puente sobre el Pilcomayo, en el palacio de Gobierno, y en el teatro lírico “Mariscal Sucre”. Sobre estas últimas, el autor decía que los chuquisaqueños “ostentaban el orgullo ateniense en palacios y teatros y en obras maestras que comparacen Sucre con Buenos Aires o París y el famoso teatro quedará en las mismas condiciones que el templo de Jano construido con recursos que los sitiadores hallaron fácilmente en el tesoro nacional”. A lo anterior se sumaba la crítica al presupuesto del Arzobispado de La Plata y a los gastos de mantenimiento de la catedral. En otros distritos del país, estos gastos se cubrían con recursos departamentales mientras los de Sucre se cargaban al tesoro nacional.
El doctor Rafael Peña
El ilustre abogado y naturalista cruceño, Rafael Peña Flores, ejerció el cargo de vicepresidente de la república durante la revolución federal y asumió el mando supremo mientras el ejército estuvo en campaña. A lo largo de las disputas políticas liberal-conservadores de finales del siglo XIX, Santa Cruz, por lo general, se alineo con esta última tendencia y ello explica la presencia de Peña como compañero de fórmula de Fernández Alonso, así como el éxito que tuvo al derrotar al liberal Eliodoro Camacho. Otro cruceño que integró ese gobierno fue don Arístides Moreno (hermano de Gabriel René) quién, hasta el estallido de la revolución, era prefecto de La Paz.
En el mundo
Pluma estilográfica
1884. La primera pluma estilográfica con un depósito de tinta es patentada por el estadounidense Lewix Waterman.
Automóvil de gasolina
1885. El automóvil a gasolina fabricado por el alemán Kart Benz. Era un vehículo de tres ruedas que transitó por la ciudad de Múnich.
Rascacielos
1885. El primer rascacielos es construido en Chicago por el ingeniero estadounidense William Le Baron Jenney.